Este tipo de cerramiento, al no llevar perfiles verticales, dota de una mayor visibilidad a la terraza. Los perfiles de aluminio están especialmente diseñados y fabricados para este cerramiento.

Para una mayor seguridad, las hojas del cerramiento están hechas de vidrio templado y tienen un espesor de 10 mm. por lo que en caso de rotura, lo harán en trozos muy pequeños sin filo, evitando posibles daños. Ofrecemos una amplia gama de acabados en perfiles, como la imitación de cualquier tipo de madera, lacados con polvo poliéster en varios colores, o anodizados en varios tonos.

El resto de accesorios y componentes que conforman el cerramiento están hechos de materiales duraderos, como el policarbonato, el acero inoxidable, etc. Todos los materiales utilizados en la fabricación de nuestros cerramientos responden a las diferentes normativas de calidad europeas.

El perfil superior va anclado al techo, corrigiendo cualquier desnivel con un perfil compensador. El perfil inferior se sujeta a la barandilla o al suelo con tirafondos de acero inoxidable. Además, a la primera hoja del cerramiento se le puede poner cerradura y manilla, dependiendo del tipo de cerramiento y su ubicación.

El cerramiento funciona de una forma muy sencilla y cómoda para el usuario, porque le permite abrir cuantas hojas quiera, bien hacia la derecha, hacia la izquierda o repartidas a ambos lados, siempre a gusto del cliente. Éstas van guiadas a través del marco inferior y están colgadas sobre el marco superior mediante unos rodamientos especiales. Las hojas recogidas a cualquier lado se sujetan con un enganche para que no se muevan o desplacen.